Crece el intercambio comercial de madera maciza

Camilo Marín Villar
Periodista

Según lo muestran las cifras más recientes del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), tanto las importaciones como las exportaciones de madera maciza, en Colombia, duplicaron su valor en el último lustro. Solamente, el año pasado el comercio de madera proveniente del bosque natural y de las plantaciones forestales creció por encima del 40%.

Tal como lo explica Alejandra Ospitia, el incremento del comercio internacional de madera no representa un hecho aislado; sin duda, es una tendencia, pues en los últimos cinco años la madera, al igual que las demás materias primas, ha mostrado cifras positivas.

La dirigente gremial celebró la noticia y se mostró complacida al conocer, por ejemplo, que el mayor porcentaje de las exportaciones de madera maciza es de productos con valor agregado (pisos, puertas, y marcos), ya que, para el sector es muy importante que las ventas sean de madera con algún tipo de transformación y, especialmente, que su origen sea legal; es decir, que cumpla con todas normas y permisos de explotación y transporte, además que se cultive con buenas prácticas ambientales y laborales.

Importaciones

Específicamente, una de las causas del buen momento de las importaciones de madera maciza fue fortalecimiento del peso colombiano durante 2010-2012, y la estabilidad de la moneda hasta mediados del año pasado, fecha en la cual la Tasa Representativa del Mercado llegó a los $1.800, debido al ingreso masivo de dólares, producto de la inversión extranjera en el sector minero-energético, los capitales golondrina y a una política expansiva por parte del Gobierno de los Estados Unidos.

Así mismo, la reducción de los aranceles, como consecuencia de la firma de los acuerdos de libre comercio con Estados Unidos y Europa, dos de los grandes productores de madera en el mundo, ocasionó el incremento de las importaciones desde esas regiones.

Basta decir que, hoy el 98% de las maderas importadas desde los Estados Unidos y el 75% de las maderas europeas entran al país sin pagar arancel, además que el impuesto más alto se encuentra en el 7%, ya que la gran mayoría de la madera industrial quedó negociada en las canastas A (desgravación inmediata) y B (desgravación a cinco años), en el caso del acuerdo con los estadounidenses; y en las canastas A (inmediata) y C (desgravación a seis años) con Europa.

En especial, hay que destacar el notable crecimiento de las importaciones de pino incluido en la subpartida 4407109000, correspondiente a “las demás maderas de coníferas aserradas o desbastadas longitudinalmente, cortadas o desenrolladas, incluso cepilladas, lijadas o unidas por entalladuras múltiples, de espesor superior a 6.0 mm de coníferas”.

Aunque, el ritmo de las importaciones en general se ha desacelerado como consecuencia de la revaluación del dólar a nivel mundial, seguramente, el mercado tendrá que seguir importando material, ya que la producción nacional no es suficiente para abastecer la demanda interna, jalonada por el auge de la construcción de vivienda y de infraestructura que vive hoy el país.

Según Alejandra Ospitia, el efecto devaluación seguramente afectará el apetito del mercado nacional por algunas de las maderas importadas, no obstante el sector continuará adquiriendo este producto del exterior, pues la oferta de los reforestadores nacionales no alcanza a abastecer el mercado.

A su vez, los empresarios cada vez más prefieren la madera certificada importada, ya que Colombia, a diferencia de la mayoría de países de la región, no cuenta con un sistema de control y trazabilidad de la madera. Por ahora, se espera que Gobierno implemente la normatividad con base en un documento entregado al Ejecutivo en el primer semestre del año, que fue diseñado con la asesoría de la Unión Europea.

Además, probablemente las importaciones de aquellas especies que no se cultivan en el territorio nacional, o de las que tienen alguna veda por parte de las autoridades, como medida de precaución para prevenir su extinción, no disminuyan ostensiblemente. Como es el caso del Cedro (Cedrela odorata), la Ceiba Tolúa, el Nogal (Juglans neotropica) y el Palo Rosa (Aniba roseadora).

Si la devaluación se mantiene a mediano plazo, también es de esperarse que el mercado busque maderas cultivadas en el país, con iguales o similares características físico-mecánicas, para sustituir las especies importadas.

En todo caso, hoy la industria maderera nacional está mejor preparada para afrontar ese reto. Desde hace algunos años, los reforestadores, los aserríos y los proveedores de madera se han fortalecido científica y tecnológicamente para cumplir con un mercado cada vez más exigente. Las empresas han realizado inversiones en investigación y desarrollos genéticos, así como en mejorar los equipos, la maquinaria y los procesos.

Las importaciones de madera maciza están conformadas principalmente por maderas de coníferas aserradas o desbastadas longitudinalmente, de espesor > 6 mm, especialmente de pinos, que representaron el 76% del mercado, con importaciones por un valor de US$17 millones, durante el 2014.

Otros productos –con una menor participación– que lideran dichas importaciones son las demás maderas aserradas longitudinalmente de espesor mayor o igual a 6 mm que tienen una participación del 9% del mercado, seguido de la madera moldurada de coníferas (3%), y madera en bruto tratada con pintura, creosota u otros agentes de conservación (3%).

En total, las importaciones de madera maciza sumaron US$ 23 millones en 2014, lo que representa un 43% más que la cifra del año inmediatamente anterior con US$ 16 millones. Mientras que, en los primeros cinco meses del 2015 (de enero a mayo), periodo en el que la devaluación alcanzó el 32%, se han negociado US$7,96 millones en madera maciza; es decir, la cifra cayó un 0,8% con relación al mismo periodo del 2014 cuando se registró US$8,02 millones.

De los US$ 23 millones en importaciones de madera maciza, el 66% llega desde Chile, por encima de países como Estados Unidos desde donde llegó el 17% de estas importaciones; China tiene el 6% de participación, e Italia el 2%.

Las importaciones de estas maderas desde Estados Unidos presentan un crecimiento interesante, ya que estuvieron muy cerca de duplicarse en el último año, teniendo en cuenta que el crecimiento fue del 91% al pasar de US$ 2,0 millones a US$ 3,9 millones.

Por su parte, desde Chile –el principal proveedor de madera hacia el país– las importaciones crecieron un 47%, a diferencia de las compras desde Canadá, que registraron una caída del 49%.

Cabe anotar que antiguos proveedores tradicionales de madera como Brasil y México fueron desplazados en el 2014 por países como Italia y España, que ocuparon el cuarto y quinto lugar, respectivamente, dentro del top cinco de los mayores exportadores de madera hacia Colombia. Brasil descendió al sexto puesto y México ni siquiera está entre el grupo de los diez.

El 60% de las compras internacionales de madera macizas estuvieron concentradas en tres compañías: Arauco Colombia S.A., que lidera el mercado con el 40% de participación, Sodimac Colombia S.A (11%), y Masisa Colombia S.A. (9%).

Exportaciones

Al igual que las importaciones, las ventas al exterior de madera maciza también han crecido sustancialmente. En el 2014 se exportaron US$34,5 millones en estos productos, mientras que un año antes la cifra había sido de US$25 millones, lo que representa un crecimiento del 41%.

Específicamente, por productos se destacan las exportaciones de maderas tropicales en bruto, especialmente de teca (Tectona Grandis), utilizada, por lo regular, para la construcción en exteriores a razón de que esta madera es muy resistente, elástica e incorruptible.

Son interesantes también las ventas de cumaru (Dipteryx sp) y polvillo (Tabebuia Serratifolia spp), empleados para fabricar pisos en general, vigas, columnas, durmientes y crucetas de madera, entre otros. Al igual que se exportan otras maderas duras como el bálsamo-Incienso (Myroxylon Balsamo) para la fabricación de estructuras, implementos deportivos y muebles en general. Estos segmentos representaron el 54% del mercado en 2014,  por un valor de US$19 millones (FOB).

Sin embargo, entre enero y mayo de 2015, las exportaciones de madera maciza han caído un 25% con relación al mismo periodo de 2014, situación que se ha vendido presentando en el resto de las industrias.

Entre los principales destinos de la madera maciza colombiana se encuentra la India, a donde llega el 42% del total exportado; de hecho, la madera es el segundo producto más exportado hacia este país.

El segundo mayor destino es China con el 36% de participación, le siguen México (9%), Vietnam (4%) y Estados Unidos (2%).

Las compañías que más aportan a la cifra de exportaciones del sector son: Los Cedros Hardwood Flooring S.A.S. que tiene una participación del 19% del mercado y se destaca por exportar decks (pisos de madera entre cruzados), trozas y bloques de maderas tropicales; le siguen Proteak Tres Sucursal Colombia (17%), que tiene cultivos en el Magdalena y exporta trozas y productos terminados de teca; y Outspan Colombia S.A.S. (14%), que además de madera es un comercializador importante de otros productos agrícolas como café, cacao, algodón, nueces y azúcar.

Informe realizado con el apoyo del Centro Virtual de Negocios (Ubicar logo del CVC)
Acerca del CVN
El CVN es una compañía dedicada al suministro y análisis de información estadística de importaciones, exportaciones y estados financieros de las empresas de diferentes países, esta empresa permite conocer el comportamiento de competidores, proveedores y clientes.
Mayores informes: www.centrovirtualdenegocios.com

0 Comentarios

    Deja un comentario

    Login

    Welcome! Login in to your account

    Remember me Lost your password?

    Don't have account. Register

    Lost Password

    Register