Tapicería: Oficio Que Va Más Allá de la Tradición
Paola Andrea Ruiz Rojas
Revista M&M
Las pieles empleadas en tapicería, esas que se sienten, se disfrutan y “visten” de distinción desde una simple silla hasta el más complejo diseño de mueble, son las que toman forma cuando las manos laboriosas de los tapiceros, las manipulan con paciencia, dedicación y gusto. A este delicado oficio, está dedicado nuestro primer ‘Paso a paso con los maestros’.
Nacer en una familia dedicada por tradición a la tapicería fue, tal vez, el evento que marcó el destino de Gabriel Asdrubal Parra, un bogotano de 41 años que desde los diez años, se dejó seducir por los encantos y la belleza de un oficio, al que él mismo considera como un arte.
De sus tíos adquirió el conocimiento, pero fue su interés hacia el oficio lo que le permitió ir perfeccionando –poco a poco y con los años–, las técnicas para tapizar. Durante un tiempo no muy largo, Gabriel tuvo que abandonar la tapicería para dedicarse a sus estudios de ingeniería de alimentos y a otros negocios, sin embargo, el amor y la pasión por lo aprendido desde niño, le demostraron que lo suyo era ser tapicero de profesión.
Desde hace cinco años –y de la mano de su esposa Gladys Ramirez–, decidió emprender la aventura de crear empresa, y en medio de estructuras en madera, telas, espumas y pegantes, aplica las técnicas y secretos adquiridos por más de dos décadas, para expresar sus sentimientos en los diseños que fabrica y a los que les imprime su sello personal.
El reconocimiento del que goza en la actualidad, ha sido el fruto del esfuerzo y la dedicación de un trabajo hecho a pulso, pero sobre todo, de la perfección con la que realiza todos y cada uno de los procesos. De hecho, gracias a su buen nombre, varios diseñadores de muebles y decoradores de interiores, así como grandes empresas productoras de mobiliario, lo buscan para entregarle sus mejores diseños, ya que ven él, la persona idónea para “vestirlos”.
En esta edición de la Revista M&M, el Maestro Parra, revelará varios de sus secretos para lograr tapizados de alta calidad y ensañará paso a paso, el tapizado de un sofá.
Para Tener en Cuenta
Para el Maestro Parra, la tapicería va mas allá de la tradición, por ello afirma que es necesario que quienes trabajen en este oficio, manejen no sólo los conocimientos que se adquieren de generación en generación, sino que además, estén capacitados en campos relacionados con materiales, –telas y espumas–, así como en técnicas de corte, patronaje y costura, entre otros.
Al existir una carencia evidente de entidades dedicadas a la enseñanza de técnicas en tapicería, la capacitación, como lo afirma Parra, debe realizarse mediante la práctica, y el perfeccionamiento de las labores se debe hacer sin duda alguna, mediante el ensayo y el error.
Otro aspecto que se debe tener en cuenta y que garantiza trabajos de excelente calidad, es la utilización de telas y espumas de primera, ya que estas dos materias primas definen el estilo y los acabados de los muebles.
Por último, y antes de iniciar el ‘Paso a paso’, este Maestro recomienda hacer cada etapa con detenimiento, y dedicarle a cada pieza, el tiempo que sea necesario, para lograr una verdadera obra artística.
Paso a Paso: Tapizado de un Sofá
Proceso de Fabricación
Paso 1: Fabricación de la Estructura
Si usted no cuenta con una estructura hecha previamente, debe realizarla según el diseño y las medidas establecidas y concebidas en la etapa conceptual.
Corte cada una de las piezas que conforman la estructura. Para este paso, debe tener las herramientas necesarias o, de lo contrario, debe contar con un taller de confianza que pueda seccionar todas las piezas.
Cerciórese siempre de haber cortado la totalidad de las piezas que necesita para el montaje.
Tome las piezas, ordénelas y proceda a armar la estructura según el diseño. Ensámblelas adecuadamente. Una bien cada parte y verifique que la estructura quede totalmente firme. Repase las uniones, recuerde que una buena estructura garantiza la solidez y firmeza del mueble.
Observe detenidamente que la estructura realizada sea fiel reflejo del diseño preestablecido, mídala de nuevo para garantizar que cumple con las dimensiones. Una vez verificada, la estructura está lista para trabajar sobre ella.
Paso 2: Postura en Blanco
Este es el paso más extenso del proceso de tapizado y es, en definitiva, el más importante, ya que aquí el mueble adquiere su esencia y se transforma de una simple estructura de madera, en un elemento con geometrías, densidades y funcionalidad real. Cada uno de los procesos que conforman esta fase –“postura en blanco”–, requiere de especial cuidado y empeño.
- Enlonar –Enresortar -Encinchar
Para realizar este proceso es necesario verificar, exactamente, cuáles son los espacios que deben enlonarse, cuáles enresortarse y cuáles encincharse.
Recuerde que los espacios a enlonarse, son todos aquellos que están vacios y que deben ser recubiertos con espuma, pero que no representan zonas de gran uso en el mueble. De igual forma, también se enlonan todas aquellas áreas que no soporten tráfico ni pesos, como por ejemplo, espaldares con cojines flotantes, ó brazos y laterales.
Una vez establecidas las partes a ser enlonadas, proceda a tomar el hilo calibre 18 y, con la ayuda de una engrapadora industrial, realice un entramado como el que se ilustra en la foto.
Observe que el entramado adquiere forma de zig–zag. Tiemple bien el hilo para que quede lo más firme posible; hágalo dejando siempre la misma distancia, y repita la operación las veces que sea necesario, hasta cubrir la totalidad de la zona.
No olvide que para lograr óptimos resultados, el engrapado del hilo debe hacerse siempre al inicio y al final de cada diagonal, observe la ilustración. Haga este procedimiento en todos los espacios que requieran ser enlonados.
Una vez haya realizado el entramado, proceda a poner la lona en cada uno de los sitios donde ubicó el hilo. Mida cuidadosamente y pegue la lona a la superficie –por encima del entramado– ayudándose de la engrapadora. Utilice la cantidad de grapas que sean necesarias para asegurarse un ajuste perfecto.
Temple bien la lona, ya que si queda distensionada, el mueble quedará mal tapizado. Si observa arrugas, defectos o bolsas de aire, es preferible repetir la operación.
Observe la forma que toma la pieza trabajada. Este mismo proceso, realícelo en todas las zonas que requieran de enlonado.
Una vez haya terminado el enlonado, proceda a enresortar aquellas áreas que lo requieran. Recuerde que el enresortado se efectúa, principalmente, donde el mueble debe soportar gran tráfico o peso, como los asientos fijos y aquellos espaldares que no estén provistos de cojines sueltos.
Tome las medidas del mueble a lo ancho y distribuya el resorte, aproximadamente, entre 15 y 20 centímetros uno del otro.
Luego, tome las medidas del fondo para conocer la cantidad de vueltas o centímetros de resorte que debe recortar. Usualmente, como medida estándar, los muebles tienen 90 centímetros de fondo, es decir que para cubrir esta distancia, es necesario recortar aproximadamente 12 vueltas del resorte. Sin embargo, si su medida difiere de la estándar, tenga en cuenta que debe a la medida real, restarle un centímetro al corte, para que a la hora de estirar el resorte, este no supere las dimensiones de fondo.
Tome grapas industriales y clávelas a las orillas las tablas, justamente en los sitios en donde irán instalados los resortes. Recorte trozos de tela y envuelva el resorte, esto para evitar fricción con la grapa. Instale los resortes con la ayuda de un martillo.
Así deben quedar los orillos de cada uno de los resortes instalados; recuerde que esto se hace para evitar los ruidos molestos generados por la fricción entre la grapa y el resorte.
Una vez haya colocado todos los resortes de un área determinada, realice un entramado contrario a la posición de los resortes; para tal fin, ayúdese de hilo calibre 18. Guíese por la ilustración, así debe quedar su trabajo.
Cuando termine de entramar, forre el enresortado con lona, tal como lo hizo anteriormente. No olvide que la lona debe ir por encima del enresortado. Tiemple con firmeza la lona, y ajústela correctamente a la superficie, usando la cantidad necesaria de grapas.
Nota: Existen tres tipos de resorte que se utilizan en tapicería, el número 9, debe usarse para espaldas por ser delgado y ofrecer mayor flexibilidad, mientras que los número 10 y 11, se utilizan sólo para enresortar asientos.
En dado caso de que el diseño del mueble escogido lleve cojines sueltos en el asiento, es preciso realizar en ellos, el paso conocido como encinchado. Tome las medidas de su asiento, y distribuya la cincha cada 15 centímetros aproximadamente, tanto a lo largo como a lo ancho del área.
Tenga en cuenta que la cincha estira un treinta por ciento y debe tener presente esta medida antes de recortarla. A manera de ejemplo, si la medida que debe abarcar la cincha es de 20 centímetros, debe restarle a esta medida, el 30 por ciento, es decir, 6.0 centímetros para que al momento de estirarla, no sobrepase las dimensiones o quede distensionada.
Primero, instale las cinchas correspondientes a un mismo sentido. No olvide tensionar bien, y asegurar con numerosas grapas para evitar que se contraigan o muevan las cinchas. Deben quedar totalmente tensionadas y guardando la distancia correspondiente y establecida.
Luego, proceda a realizar la instalación de las cinchas que van en el otro sentido; la idea debe ser formar cuadros, como los que usted puede visualizar en la fotografía.
Recuerde que la cincha debe ponerse de manera intercalada, es decir, por encima y por debajo de las ya colocadas. Observe la ilustración. Una vez haya terminado, recubra con lona, tal y como en los paso anteriores.
- Cortar y Pegar la Espuma
Uno de los elementos más importantes en tapicería es la espuma y la selección adecuada de esta materia prima, así como el manejo ideal de la misma, son aspectos que definen en gran parte, la comodidad, calidad y estética de los muebles.
En el mercado existen varios tipos de espumas, con densidades y grados de rigidez diferentes. La selección de la espuma debe regirse por aspectos relacionados con el sitio donde se ubicará, así como el grado de comodidad que se quiere lograr.
Nota: Preferiblemente, escoja espumas blandas, pues otorgan confort al usuario del mueble. Para los espaldares, utilice espuma de densidad 13 y para el asiento, use de 26 o 36 penta
Con la ayuda de un metro, tome todas las medidas de las zonas que deben ir recubiertas con espuma. Tenga presente que éstas deben ser exactas, ya que la espuma debe colocarse a ras. No deje ventaja en la espuma, los pegues deben ser precisos.
Con la ayuda de un cuchillo –afilado con anterioridad–, corte la espuma en falso, es decir, ladeando hacia adentro el cuchillo. Observe como debe quedar el corte, hacerlo de esta manera, garantiza que al momento del pegue, los lados encajen bien.
Comience a ensamblar la espuma, péguela a ras de la superficie. Si debe hacer uniones adicionales a razón de que no le alcanzó el trozo cortado, realícelas cuidando de no generar bultos ni relieves que luego interfieran con el proceso de acondicionamiento de la tela.
Observe la apariencia que va adoptando el mueble. Una vez termine de colocar toda la espuma, el mueble está listo; en el argot de la tapicería, está “puesto en blanco”.
Paso 3: Corte
Antes de cortar la tela, tenga en cuenta que debe tomar las medidas de las siguientes partes del mueble: Asiento, Frente, Espalda, Ventanera Interna, Ventanera Externa, Contra y Chapera o lateral de la espalda.
Si el sofá lleva cojines de asiento y/o de espaldar, debe además tomar las medidas de las tapas de cojines, fajas frontales y laterales, así como de las cremalleras.
Anote las medidas en un cuaderno, hágalo de manera ordenada, es decir, las medidas del asiento en un lado, las del espaldar en otro, y así sucesivamente con cada una de las partes del mueble; esto le ayudará a no confundir las dimensiones y evitar errores en el corte de la tela.
No olvide tomar cada una de las medidas. Ancho, largo y profundidad; en cada medida debe dejar un centímetro de más, que es el espacio destinado para pasar las costuras.
Ayudado de una regla, escuadra, y tizas de costura, demarque las áreas por donde realizará los cortes. En caso tal de hacer piezas en serie, realice los moldes o plantillas (patronaje) para con éstos marcar la tela.
Realice con cuidado este trabajo, pues confundir piezas y medidas puede acarrear grandes pérdidas de material. Una vez marcada cada serie o parte de los muebles, sepárelas y déjelas listas para los cortes.
Nota: Tips del Maestro: Si usted escogió tela sintética para su mueble, no le deje el centímetro de ventaja, ya que esta tela estira.
Corte las piezas previamente demarcadas con tijeras bien afiladas; no olvide agruparlas de acuerdo a la parte del mueble que conformen, pues lo recomendable es hacer el ensamblaje pieza por pieza.
Paso 4: Acondicionamiento y Costura
Una vez cortadas las piezas, verifique que correspondan y encajen correctamente en cada parte del mueble para las que fueron cortadas –paso que recibe el nombre de acondicionado–; de esta forma se garantiza antes de la costura, un ajuste a la medida.
Luego, y una vez acondicionada cada pieza, proceda a realizar la costura, hágalo paso a paso, hasta formar las partes completas.
La costura debe hacerse en el centímetro de ventaja que se dejó a lado y lado de las piezas. Contrate personal idóneo para esta labor, pues las costuras deben hacerse rectas y de la mejor forma posible.
Observe la ilustración, fíjese que el ensamblaje se realiza paso a paso.
Pase las costuras y luego, proceda a medir la pieza en el mueble, esto le permitirá verificar que haya quedado acorde con las medidas tomadas. Si observa cualquier defecto, puede corregirlo sobre la marcha. Siga armando cada pieza como si fuera un rompecabeza, parte por parte.
De esta forma debe ir forrando cada área del mueble. Si usted considera que el tapizado está perfecto, proceda a realizar las costuras de remate y los acabados.
Si su mueble tiene cojines de asiento y espaldar, haga los forros siguiendo las indicaciones dadas con anterioridad.
En aquellos sitios donde se deba hacer terminaciones imposibles de hacer a máquina, realícelas a mano y procure hacer puntadas invisibles para no dañar la estética del mueble.
Paso 5: Terminación y Acabados
Una vez haya concluido con la labor de tapizar del mueble, prosiga a forrar la parte donde se ubican las patas, con lienzo del mismo color de la tela con la que tapizó el sofá. Hágalo ayudándose de la engrapadora industrial.
A pesar de que esta parte no se ve, fórrela con perfección, pues los remates hacen la diferencia. Ubique e instale las patas de los muebles y atorníllelas bien para evitar que se muevan.
Al terminar este paso, el mueble queda listo para que sea utilizado por el cliente. Verifique cada pieza para asegurarse de su calidad.
Fuentes
- Gabriel Asdrubal Parra. Maestro Tapicero. tapizadosnatazzy@hotmail.com
- Gladys Ramirez. Gerente Administrativa, Tapizados Natazzy
- Fotos: Paola Andrea Ruiz
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