Vintage: Tendencia en decoración de interiores

Gabriel Bravo Hermida
Periodista

El estilo vintage es una atractiva tendencia para decoración de interiores que se basa en la combinación de lo antiguo con lo actual para crear contraste, utilizando principalmente diseños de mobiliario de épocas pasadas. En la actualidad se ha convertido en una fuerte tendencia en decoración de mobiliario.

Vintage es un término que a lo largo del tiempo ha tenido distintos significados: en francés la palabra se utilizaba para referirse a objetos, accesorios y prendas propias de 1920; también se utilizaba en inglés para denominar a los vinos obtenidos de las mejores cosechas. Tiempo después, en la década de los 60, se utilizó para referirse a la recuperación y restauración de objetos antiguos que se caracterizaban porque, en su mayoría, eran de fabricación artesanal.

Hoy en día la palabra se utiliza para denominar un objeto de decoración, un mueble, un cuadro, un utensilio o cualquier objeto perteneciente a una época pasada que, aun cuando antiguo, no se califica como una antigüedad, debido a que sigue siendo útil, y no solo existe como un artículo de colección.

Vintage se refiere a todos los artículos, muebles y objetos producidos en décadas pasadas (entre 1900 y 1980) que continúan siendo funcionales y decorativos, sin importar el pasar del tiempo. El estilo vintage se compone de piezas originales, que aparte de ser útiles, tienen un valor histórico y estético.

En la decoración vintage se utilizan piezas antiguas exclusivas y de gran calidad que se combinan con objetos más modernos. El valor de los objetos vintage, como los muebles, se debe al tiempo que llevan en el mercado, el contexto histórico en el que se fabricaron, el diseño característico de una época específica y su exclusividad.

Un mueble es considerado como vintage cuando tiene mínimo dos décadas de antigüedad; sin embargo, en este contexto la palabra se utiliza para referirse a todas las unidades fabricadas antes de 1990, ya que el mobiliario producido después de esta fecha, es considerado moderno.

Los muebles más representativos de esta tendencia suelen ser sillas, sillones, sofás, cajoneras y baúles, que principalmente están hechos en madera, y se caracterizan por sus formas rústicas y robustas con detalles metálicos. De igual forma, los muebles más usados en la decoración vintage se distinguen por las curvas y formas ovaladas, como los sofás Luis XV.

En esta tendencia, los materiales protagonistas en los muebles son la madera, el hierro forjado, el cuero y el mimbre, que usualmente se combinan con estampados floreados, colores vivos y pasteles. La estética de los muebles vintage se destaca por su antigüedad, envejecimiento, y porque luce desgastada.

Estilos de muebles vintage

A lo largo del siglo XX se destacaron diversos estilos de mobiliario vintage provenientes de diferentes culturas y lugares del mundo, los cuales han sobresalido en el mercado por su funcionalidad y diseño. Los muebles vintage pueden integrarse en otros estilos, y mezclarse con diversos elementos para crear ambientes modernos con detalles clásicos.

Estilo nórdico: los muebles de estilo nórdico se caracterizan por la sencillez en el diseño y la funcionalidad de optimizar el espacio. Su característica principal es la capacidad de almacenamiento, como las clásicas camas con cajones o mesas con múltiples compartimentos.

Los colores característicos de estos muebles son el gris y el negro, que se combinan con los tonos naturales de la madera, la cual aporta calidez. Estos muebles se fabrican principalmente en pino, roble, haya o arce, especies típicas de los territorios escandinavos. Los diseñadores de interiores suelen combinar este estilo con juegos de cama en colores neutros, tapetes y cojines con estampados modernos de líneas y texturas.

Estos muebles pueden adaptarse a cualquier ambiente, y se pueden combinar con artículos de otros estilos vintage, como los japoneses, ya que ambos se inspiran en la naturaleza de sus entornos; los ambientes escandinavos utilizan el color blanco, porque brinda mayor luminosidad al espacio.

Estilo industrial: Esta corriente surgió en Nueva York durante la década de los 50 y se caracteriza por no enmascarar ni ocultar los materiales de construcción y sus estructuras. Materiales como el hierro forjado, la madera de aspecto rústico, la chapa y los tapizados en cuero predominan en los muebles de estilo industrial.

Sus colores principales son los grises, marrones, tonos cobrizos y negro, que también se combinan con colores vivos. Este tipo de mobiliario es muy común en apartamentos de techos altos y edificios nuevos para darles un aire moderno a lo clásico. Generalmente se combina con cuadros de artistas famosos y contemporáneos.

Estilo japonés: Se caracteriza por ser elegante, sobrio y simple. El diseño de estos muebles está inspirado en la naturaleza, de allí que transmiten una sensación de tranquilidad. La sencillez es una de las claves de este estilo, los muebles son minimalistas dado que la cultura japonesa no admite ostentaciones.

La madera, el papel de arroz, el lino y el bambú, son los materiales principales con lo que se fabrican este tipo de muebles, y sus colores principales son los marrones, verdes, grises y los colores neutros.

• Estilo francés: Está inspirado en elementos decorativos originarios del estilo rococó, cuyos orígenes se remontan a los reinados de Luis XV y Luis XVI. Suelen destacarse por sus curvas, formas ovaladas y por los colores pasteles.

Los muebles se fabrican en madera maciza, con diseño de curvas especialmente en las patas de las mesas, en apoyabrazos y respaldos, que generalmente tienen acabados y tallados artesanales que los hacen clásicos y elegantes. En la actualidad está muy de moda tener uno que otro mueble de este estilo combinado con otros de estilos y colores modernos.

Estilo retro

El estilo de muebles vintage se puede confundir con el retro, debido a que la estética es muy similar, pero se diferencian en un aspecto: La edad. Los muebles vintage son originales; es decir, fueron fabricados en una época pasada, y los muebles retro son piezas fabricadas en la actualidad, con diferentes materiales, pero replicando los diseños y las formas de estilos clásicos.

El estilo retro se caracteriza por la combinación de colores, texturas y materiales, la mezcla de diseños, desde lo más antiguo hasta lo más moderno. Predominan en el, los colores vivos que les dan un toque retro a cualquier espacio, basta con agregar muebles típicos de la época -como una mesa redonda, un puf de cuero o un sofá de estampado- para lograr el efecto.

Se pueden aplicar distintas técnicas sobre los muebles que haya en casa o en la oficina, para darle un aspecto vintage o retro y hacerlos parecer antiguos. Las dos técnicas más utilizadas para la restauración de mobiliario y darles un acabado envejecido, son el patinado y el decapado.

Patinado

Es el aspecto que adquieren ciertos objetos con el paso del tiempo, y la técnica consiste en crear pátina (desgaste del color que produce el envejecimiento especialmente en pinturas), decorando superficies -en su mayoría, de madera, metal o hierro forjado- lijando y pintando la madera para conseguir un efecto envejecido y alargar la vida del mueble.

Decapado

Consiste en lijar la pintura de un mueble, removiendo parte de la capa, para que se vea el color de la madera con el fin de hacer ver el mueble envejecido. En la decoración vintage, el decapado se utiliza sobre todo en muebles blancos.

A continuación, La Revista M&M presenta diferentes ambientes modernos -inspirados en los estilos vintage y retro- como habitaciones, interiores de la casa, bares, entre otros, en los que se reviven muebles y diseños antiguos en tiempos modernos.

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