El octogenario arquitecto japonés, Arata Isozaki, ganador del Premio Pritzker de Arquitectura 2019, fue reconocido recientemente por crear una silla inspirada en la diva de Hollywood, Marilyn Monroe, la cual trascendió y se volvió una pieza de museo por su relevancia e influencia para el diseño de muebles moderno.

Isozaki también es conocido internacionalmente como la mente creativa detrás de varias estructuras prominentes como el Museo de Arte Contemporáneo (MOCA) en Los Ángeles-EE.UU., y el edificio del Equipo Disney en Orlando, en la Florida, así como Sitios globales como Art Tower Mito en Japón y Allianz Tower, un rascacielos recién inaugurado en Milán.

Como muchos de los arquitectos destacados, Isozaki emplea su técnica y habilidad no solo para la creación de proyectos a gran escala, sino también en el contexto del diseño de muebles.

En efecto, una de las obras más célebres de Isozaki es la silla «Marilyn»; la cual está hecha de madera de abedul teñida de negro, e inspirada en el cuerpo de la célebre actriz.

La espalda alta y las curvas fluidas del diseño de Isozaki se lograron con el propósito de representar la figura curvilínea de Monroe. Es moderadamente convexo y el respaldo cóncavo, se compensa con el asiento trapezoidal de la silla, creando una interacción complementaria de formas geométricas y fluidas que imitan elementos presentes en varios de los proyectos arquitectónicos más aclamados de Isozaki.

Conocido como parte de su obra arquitectónica, Isozaki se vinculó estrechamente con el grupo Memphis en la década de 1980. La silla “Marilyn” anuncia el posmodernismo y se inspira en la obra de Charles Rennie Mackintosh , muy influido a su vez por el diseño japonés.

La silla fue creada en realidad para su uso en las oficinas ejecutivas de un banco japonés. Parte de la colección de Isozaki se encuentra en el Museo de Arte de Filadelfia.

Con información de: www.forestalmaderero.com