Gabriel Bravo
Periodista M&M

Ambientar entornos es la nueva forma en que se promocionan y se venden los muebles, pero no solo se trata de ubicarlos en el espacio; la iluminación es uno de los factores claves al momento de disponer un lugar de exhibición, puesto que ella tiene diferentes finalidades según el propósito.

Una de las estrategias de mercadeo y venta que está tomado cada día más fuerza en la industria de mobiliario es la de no vender muebles por separado, sino mostrarlos y ofrecerlos en ambientes que sean muy atractivos para los clientes, según sus aspiraciones o necesidades.

En un ambiente se concentra el conjunto de objetos que interaccionan en un espacio destinado a una función específica (el ambiente de hogar, el laboral, vecinal, social y urbano) y que coexisten con quienes habitan el espacio. Cada ambiente genera sensaciones que pueden resultar positivas o negativas, que inciden directamente en el estado de ánimo, y condicionan la actitud de quienes permanecen en él. De allí que la creación de ambientes ha sido tema de estudio de diseñadores, arquitectos y comercializadores de mobiliario quienes buscan lograr espacios más confortables, acogedores, funcionales y saludables.

Son varios los elementos que intervienen en la conformación de un ambiente -sea de cocina, oficina, estudio, alcoba, sala, biblioteca, entre otros- todos de vital importancia: área, mobiliario, accesorios, ventilación, distribución, acceso, decoración e iluminación natural o artificial.

La Iluminación

Uno de los aspectos que más ha tomado importancia en la decoración y en el diseño de ambientes es la iluminación, que se podría definir como: La forma de alumbrar u ofrecer claridad a un espacio oscuro o que no tenga acceso a luz solar; su función es optimizar al máximo la visibilidad del recinto, y decorar el lugar.

El campo de la iluminación ha avanzado sustancialmente, al punto que hoy, además de la iluminación natural, existen otras cuatro fuentes: La luz incandescente, la fluorescente, la halógena y la luz LED; todas buscan satisfacer mediante diferentes tipos de luminosidad, necesidades utilitarias y suntuarias dependiendo más de la calidad lumínica que de la cantidad de luz que emitan. Los tipos de luminosidad se pueden definir como:

Iluminación ambiental, utilizada para dar acceso visual general en un espacio, también aporta vida a una habitación.
Iluminación acentuada o puntual, dirigida a un espacio específico, permite un fácil reconocimiento de la ubicación.
Iluminación de tareas, ayuda con el desempeño en el desarrollo de actividades, contribuye para evitar tensión y rigidez en los trabajadores.
Iluminación estética o decorativa, se utiliza para resaltar y destacar detalles, para acentuar un objeto, hacerlo llamativo, y capturar sobre el la atención

Las luces también pueden ser cálidas o frías dependiendo de la tonalidad. Para áreas de trabajo usualmente se utiliza la luz blanca (fría) que ayuda a concentrarse en la ejecución de labores. Por el contrario, la luminosidad amarilla (cálida) se recomienda para zonas de descanso, como las habitaciones, por su efecto relajante.

Una tendencia mundial

El uso de la luz LED (Diodo Emisor de Luz) se ha convertido en tendencia mundial por parte de arquitectos, diseñadores, decoradores y fabricantes de mobiliario debido a sus beneficios ambientales, económicos y funcionales, pues es amigable con el medio ambiente, más duradera y de bajo consumo, y ofrece gran variedad de productos y presentaciones a la hora de crear distintos ambientes.

La luz LED consume aproximadamente un 85% menos energía que un foco incandescente, un 40% menos que un tubo fluorescente y un 80% menos que un halógeno. Por otra parte, las lámparas, bombillas y demás presentaciones de iluminación LED tienen una duración de entre 30 mil a 50 mil horas de vida útil.

Igualmente, existen varios servicios que incluyen las diferentes luces LED, como sensores de movimiento, controles a distancia, programación de prendido y apagado, atenuador de luz o dimmer para controlar la intensidad de la luz, entre otros.

El uso de luz LED significa seguridad y compromiso con el medio ambiente, pues todas las presentaciones son totalmente reciclables. Todos los productos que funcionan con este diodo emisor no producen radiaciones infrarrojas ni ultravioletas; además, debido a su bajo índice de calefacción evitan incendios.

Confort, duración, versatilidad, seguridad, bajo consumo de energía, posibilidades de uso y de ambientación, son los beneficios que hoy reciben los usuarios de la luz LED, hechos que las convierten en la nueva tendencia de alumbrado para los distintos sectores: públicos, viales, industriales, residenciales y decorativos.

La Revista M&M, de la mano de la empresa Häfele (líder en la comercialización de iluminación LED) y su distribuidor HERYCOM S.A.S, presenta diferentes tipos de ambientes que se pueden crear a partir de las presentaciones y servicios de esta luminaria.

Lámparas de aplique, focos dirigidos, tiras o cintas, bombillos, tubos, focos industriales, entre muchas otras presentaciones de luz LED, facilitan el diseño de diferentes espacios arquitectónicos con mobiliario, pues sirven para iluminar y crear ambientes confortables, para destacar los muebles y facilitar el acceso a todos los espacios.

Fuente:
Con información de: www.cambioenergetico – com/Documentos/presentaciones/Todo-sobre-iluminacion-LEd.pdf

Una luz, un objetivo