Marcela Guarín Coronado

Periodista M&M

Esta empresa colombiana, fabricante y líder en la exportación de muebles a los Estados Unidos y ganadora de los premios más importantes en la industria −otorgados por el Gobierno de Colombia−por su buen desempeño, luego de 60 años de actividad comercial en el mercado norteamericano, llega para competir fuertemente, en su país de origen.

IMA, una empresa que durante décadas ha sido ejemplo para las compañías nacionales que buscan conquistar el mercado internacional con la producción de muebles para las líneas de hogar, oficina, y sector hotelero, de alta calidad; es en la actualidad una de las empresas colombianas líder en exportación, precisamente, de esta variedad de piezas, con un importante suministro a clientes en América y Europa.

La exclusividad de sus diseños, fabricados con maquinaria de tecnología avanzada y el aporte de mano de obra proveída por un grupo de expertos, le ha permitido a IMA dotar con sus muebles a destacados clientes como el Congreso y Senado de la República de Colombia; y a nivel mundial, a hoteles de la categoría del Marriott, Radisson, Intercontinental, y Hilton, entre otros.

La compañía −que inicialmente, en 1950, se dedicó a la fabricación de juguetes, en un área de 100 m² y que desde entonces continúa desarrollando sus actividades en la zona industrial de la capital del país− siempre ha estado inclinada a satisfacer las demandas estéticas y funcionales del mercado.

El auge de la empresa en la industria de muebles comenzó en 1955, con la fabricación de gabinetes industriales de gran tamaño, utilizados como cajas para televisores a blanco y negro, y las tradicionales ‘radiolas’ de los años cincuenta; mobiliario que produjo bajo una mentalidad exportadora, y que la convirtió en proveedor de empresas estadounidenses de electrodomésticos, mundialmente populares, como General Electric, Zenith Corp. RCA y Panasonic USA. IMA fue también proveedor exclusivo de las firmas Singer y Pfaff, no sólo para Colombia sino para el mercado del Caribe y Centro América.

La empresa de muebles que en poco tiempo había asumido, con responsabilidad, su reconocimiento internacional, decidió incursionar en el mercado de muebles de hogar y fue el primero en diseñar y fabricar muebles RTA (listo para armar) en Colombia, hechos en lamina de aglomerado y recubiertos en PVC, y conformar para su salida, una red de 20 vendedores distribuidos por todo el país.

Durante los años setenta, IMA logró un importante avance tecnológico, tras la incorporación de maquinaria especializada de última generación y gran rendimiento, como una contorneadora Perfiladora Automática de control numérico y para 1973, realizó contacto con una fábrica estadounidense a la cual, le envió partes talladas para muebles; como consecuencia de éste hecho, la empresa abrió una oficina en los Estados Unidos, en la que ofrecía partes y piezas para muebles de hogar, así poco a poco, su negocio fue fortaleciéndose hasta que logró el envío de muebles terminados para ser vendidos en ese país.

Crisis Económica que Provocó el Florecimiento  

IMA había sido una compañía cien por ciento exportadora, pero en el año 2002 y debido a la devaluación del dólar y del peso, producto de la crisis económica, la empresa vio significativamente disminuidas sus ventas hacia los Estados Unidos. La difícil situación, sumada a la negativa del Gobierno Colombiano a aplicar soluciones rápidas −aseguran los directivos de la empresa− frente a la crisis que afectó directamente la rentabilidad de diversas compañías, conllevó a que IMA se concentrara en el negocio de la hotelería, a nivel internacional, aprovechando su condición de productora de muebles en volumen.

“Pareciera que todos los países están consientes de su moneda, menos Colombia en donde, entre más se revalúa el peso, más contentos están en ciertas esferas; no importa que se creen altos niveles de desempleo y que se invada el país con artículos importados los cuales, perjudican a la industria nacional”, afirmó al respecto, Jaime Lechter, Presidente de la compañía.

Sin embargo y a pesar de contar con un fuerte liderazgo internacional, la empresa, en el año 2010, concluyó que requería con urgencia lograr un equilibrio en el mercado, por lo cual, en junta directiva, tomó la decisión de penetrar con su posicionada oferta, el mercado colombiano.

Ahora, gracias a los TLC’s, y a que muchas Pymes entrarán a competir en el nicho de muebles, IMA se prepara para demostrar su gran potencial en calidad y creatividad, y enfrentar con mobiliario de alta gama, las nuevas oportunidades que se abren para la compañía. En este sentido el Plan Vallejo, bajo el que opera IMA, es una buena plataforma para sus operaciones pues sus productos entran libres de impuestos a los EE.UU, hecho que la beneficia considerablemente a la hora de competir local e internacionalmente.

Ampliación del Mercado con ‘Un kuarto’

Consciente de su panorama presente y futuro, a finales del 2011, la empresa abre su primer almacén piloto en Bogotá, dedicado a la línea de hogar, la tienda ‘Un Kuarto’, ubicada en la planta de producción principal, en un área de 800 m^2, y con muebles producidos bajo los mismos estándares del producto exportado: con alto diseño, pensados en los ambientes colombianos, que pueden ser utilizados en espacios pequeños y cuentan con el respaldo de 60 años de tradición y posicionamiento.

El almacén expone hoy, seis colecciones en variados diseños –con piezas elaboradas en maderas de Perillo (Himatanthus Articulata); Moho (Cariniana Pyriformis); Roble (Elacodendrom Sp); Nogal (Plantimiscium Pinnatum); Anime (Aniba Perutilis) y Flor Morado (Quercus Humboldtii), entre otras– y que reciben nombres de famosos artistas.

Así, aparecen las colecciones ‘Miguel Ángel’, compuesta por piezas y accesorios trabajados en cuero, material que les otorga un toque étnico y elegante; la línea ‘Obregón’, caracterizada por ser punto de convergencia entre lo clásico y lo contemporáneo; y la línea ‘Picasso’, regida por el concepto minimalista –moderno y simple– de los años setenta. La oferta la complementan, la línea ‘Dalí’, que se vale de la madera de Perillo para la producción de muebles de concepto contemporáneo; ‘Negret’ de grueso macizo en sus piezas para revelar la tendencia minimalista deco; y la línea ‘Manzur’, destacada por sus particulares ensambles.

En este ambicioso proyecto, la compañía ha centrado todos sus esfuerzos. Con la idea de incursionar fuerte, en el mercado nacional, ha dedicado un año a arduas investigaciones para hallar diseños justos a las necesidades y gustos de los compradores colombianos; y ha llevado a distintos miembros de su equipo a ferias nacionales e internacionales, para que exploren tendencias y creen productos locales, bajo los mismos estándares de calidad que exige los Estados Unidos.

La empresa asegura que, gracias a éste nuevo punto de venta, ha logrado generar alrededor de 30 empleos para el área comercial, y que su área operativa se ha incrementado en un 10 por ciento. Durante éste mes de junio, IMA inaugurará el primer almacén oficial al público, en el norte de la capital, y tiene previsto abrir también, puntos de venta en otras ciudades del país.

Estructuras Perfectamente Diseñadas

Actualmente, la empresa cuenta con más de 600 trabajadores, distribuidos en 17 áreas físicas, cinco técnicas, y 12 administrativas, se trata de un grupo de expertos quienes, en este momento, trabajan en la elaboración de 100 productos –como butacas, sillas, armarios, espejos y mesas, entre otros– para las líneas de hogar y hoteles, en diferentes tamaños, complejidad y tiempo de elaboración.

IMA –que ha sido ganadora del ‘Premio Nacional de Calidad’, el ‘Premio al Mérito Industrial’, y dos veces del ‘Premio al Mérito Exportador’ y que registra ventas anuales, por valor de 12 a 20 millones de dólares– cuenta en la actualidad con tres plantas situadas en Bogotá, dos de ellas al sur de la ciudad, de 7.500 mts² y 3.200 mts², en las que realiza todo el proceso de transformación la madera maciza, desde el secado, hasta el pre maquinado, y lo concerniente al trabajo de chapillas, corte de lámina y prensado.

La compañía, señala que, en la planta de producción, todos sus procesos, los verifica bajo la estricta normatividad que exige el mercado norteamericano y según los principios técnicos básicos para el correcto manejo de la madera; así, para el proceso de secado, por ejemplo, mantiene niveles de humedad relativa, muy bajos, que oscilan entre 4 y 6 por ciento.

La fábrica principal, ubicada en la zona industrial de la capital del país, cuenta con un espacio de 15.000 mts² de planta, 4.000 mts² de oficinas y áreas comunes (baños, casino, entradas, entre otros), y 800 mts² de sala de exhibición; allí, diseña y fabrica directamente, sin la asistencia de satélites.

El proceso de diseño, específicamente, corre por cuenta de un área comprendida por 20 profesionales –entre gráficos, industriales e ingenieros– quienes se valen de software como Inventor y Autocad, para producir los bocetos a ser materializados en productos funcionales y estéticos. Dichos programas revelan, virtualmente, la apariencia de las piezas terminadas, al funcionar como simuladores a través de los cuales, los diseñadores, además, identifican posibles errores en las estructuras de las piezas, determinan resistencias de acuerdo a las características físico-mecánicas de la madera, definen calibres, colors y texturas, y verifican el funcionamiento de herrajes, sin importar la complejidad del diseño.

Los diseñadores, una vez generan el mueble en el software, realizan los planos, la lista de los materiales requeridos, y señalan las máquinas encargadas para la fabricación de las piezas; son también los encargados de definir las líneas de producción; de presentar, cada dos o tres semanas, nuevos modelos; y de detectar las tendencias que orientan los gustos de los consumidores, y que son la base para la producción de nuevas piezas con destino local e internacional.

Otra área de gran importancia en la producción de muebles IMA, es la de modelos, puesto que todos sus objetos nacen de prototipos ensayados varias veces para determinar comportamientos en condiciones de uso, reales. Se trata de una “pequeña fábrica”, dentro de la planta, que cubre aproximadamente 500 metros; allí laboran cerca de 30 personas que identifican y corrigen los problemas de calidad características y dimensiones que puedan presentar los muebles en producción y que de paso, le ahorran tiempo y dinero a la compañía, por posibles reclamaciones por garantía.

En este “aceitado tren de producción”, uno de los ejes centrales de la empresa es el área de maquinaria computarizada CNC, diez equipos encargados de cortar, modular y maquinar de manera precisa, rápida y con una eficiente optimización de las materias primas. Una ruteadora de control numérico, doble espegadora, taladro neumático, perfiladora automática, enchapadora de cantos, y una prensa de alta frecuencia, son máquinas con las que IMA ha trabajado, desde hace más de 15 años, para obtener sus productos.

Cabe destacar, que durante el proceso de producción de sus muebles, la empresa realiza chequeos periódicos a través de los cuales verifica la calidad de cada una de sus piezas. Una de las pruebas que aplica es el ‘Droptest’, que consiste en empacar el mueble, dejarlo rodar a una distancia de casi 8.0 metros, en un plano inclinado, desempacar el mueble y, finalmente, comprobar el estado del mismo; el ensayo tiene como intención medir la resistencia del empaque.

A nivel de acabados, está el área de pintura, en la que trabajan cerca de 50 personas, y cuenta con 13 cabinas, una de ellas presurizada para evitar problemas de contaminación. Se trata de un área sellada herméticamente que favorece el mantenimiento de un sistema de aire controlado, mediante un proceso establecido y estandarizado para el uso de lacas nitrocelulosas, catalizadas, y de poliuretano, en algunos casos, según el modelo del mueble. Tanto para ésta como para otras áreas, los insumos, los demanda IMA de proveedores mayoristas, nacionales o internacionales, exclusivos, de varios países del mundo.

De otro lado está el departamento de talla, uno de los más emblemáticos de la compañía, que cuenta con 40 personas encargadas de pulir el trabajo que efectúan las máquinas, y que se apoya, previamente, en un proceso de pantografiado, una técnica de delineación que permite el perfeccionamiento de los diseños. La compañía, que se esfuerza por capacitar su personal, se precia de tener sus propios talladores, quienes, en la mayoría de los casos, son egresados de las escuelas instaladas por IMA en Pasto y Bogotá.

Es importante anotar que años atrás, la sección de talla de IMA contaba con 120 talladores, pero ahora y debido a la demanda de muebles planos y de formas limpias, la técnica ha sido relativamente desplazada; aun así, la empresa es una de las pocas en olombia que vende piezas talladas, por volumen, a Estados Unidos, con éxito.

De hecho, el mercado de EE.UU reconoce a esta empresa por su alto nivel de profesionalismo y, particularmente, por su dominio de la técnica ‘Distrès’, un proceso que proporciona al mueble la apariencia de un objeto antiguo siendo nuevo, mediante ‘golpes’ muy refinados sobre la superficie de la pieza; para ello, cuenta con personal especializado. Vale señalar, que en la actualidad, IMA produce, aproximadamente, 400 piezas bajo ésta técnica; hace dos años, la producción alcanzaba las 800 pero hoy, y como consecuencia de la situación económica de los Estados Unidos, la demanda ha disminuido considerablemente.

Finalmente está el área de tapicería, encargada de la fase final del proceso de acabado de las piezas y donde también realizan, los operarios, el empaque de los muebles finalizados, de acuerdo con las certificaciones y normas exigidas en acabados, empaque, transporte y balaje logístico.

Fiel a su historia y a su política de conquista comercial, la empresa, actualmente, ejecuta, entre otros proyectos, la remodelación del hotel James en Miami Beach, el Hard Rock en North Miami, Four Seasons en Orlando, Vogue en Canadá, y el Bristol en Panamá. Cabe destacar, que el pasado mes de diciembre, IMA realizó la primera exportación a un hotel en Dinamarca, con lo que aspira comenzar exportaciones frecuentes al continente Europeo.

IMA se presenta así como una empresa líder que, de cara a las dificultades, ha logrado sobrepasar las barreras que se levantan para hacer empresa, dentro y fuera del territorio nacional; ha mostrado desde su nacimiento, gran preocupación no sólo por la calidad de su producción y la correcta adecuación de sus áreas físicas, sino también por la estabilidad laboral de sus empleados −prueba de ello es que hasta la fecha algunos cumplen más de 25 años vinculados a ella, y aún permanecen desarrollando sus labores en la empresa− y se ha consolidado como resultado de su arduo trabajo, uno reconocido por su calidad, eficiencia, y liderazgo.

Fuentes:

Jaime Lechter, Presidente IMA S.A Industria de Artículos de Madera S.A.

Marcela Contreras. Directora Comercial. mcontreras@imasa.com.co. 

Fotografía: IMA S.A