Redacción M&M

Pese a que, con los años, la industria a todo nivel ha desarrollado una amplia gama de materiales de distintos orígenes para crear infinidad de productos, la madera sigue ocupando un puesto predominante en el abanico de opciones para crear y producir. Hoy está presente en innovadores muebles, en desarrollos tecnológicos antes impensables y en imponentes obras arquitectónicas que retan las posibilidades conocidas del material; en casi en cualquier campo donde la creatividad humana se manifieste de la idea al objeto.

Por excelencia, el insumo para muebles

Spyndi: la original silla inspirada en la columna vertebral

El diseñador lituano Mundaugus Zilionis es el creador de Spyndi, la llamativa silla inspirada en la columna vertebral humana, que destaca por su sistema flexible compuesto por 1,260 piezas barnizadas de contrachapado de abedul, trabajadas a mano, y que pueden dar origen a distintos muebles.

Muy versátil, la imaginación de quien sea su propietario jugará un papel fundamental en las formas y servicios que preste. Por ejemplo, puede ser una hamaca, banqueta o reposa pies, la clave consiste en probar para dar con la mejor curvatura.

“Crear una nueva configuración para la silla Spyndi requiere cierta planeación y tiempo. Cada pieza tiene un lado A y B, que al ubicarse en cierta posición crea diferentes formas. Por ejemplo, una línea curva es creada con A+A+A o B+B+B, una línea recta por A+B+A, y cualquier otra forma es una combinación de ambas. Una vez ubicada, un mecanismo de bloqueo con llave se gira para impedir el movimiento”, explica su creador.

Una vez montada, la silla se puede mover y doblar libremente. Cuando el usuario encuentre la posición que más le guste, acciona bloqueos ocultos en ambos extremos de la silla para que encaje en su forma y para ello puede utilizar una llave de ángulo ordinaria que asegure las cerraduras.

Puede adaptar la silla ergonómica para apoyar la espalda, el cuello y las piernas. Su manual de instrucciones también incluye formas recomendadas. De hecho, el usuario puede añadir un cojín para que sea más cómoda.

Zilionis ha lanzado una campaña en Kickstarter con la finalidad de aumentar la capacidad de producción de la silla. Spyndi viene con una garantía de por vida y por cada compra se siembra un árbol.

Con información de:
www.expansion.com

Un sofá convertible, versátil, ingenioso y atractivo

La falta de espacio de los apartamentos en las ciudades modernas ha hecho que las personas tengan que pensar y acomodar los muebles de la manera más óptima posible. Los muebles multifuncionales se han convertido en una alternativa interesante ya que prestan distintos servicios ocupando un solo espacio.

Para responder a esta necesidad de optimizar el espacio disponible, la diseñadora de origen ucraniano Julia Kononenko presenta este sofá multifuncional que se transforma también en una mesa con seis taburetes. La estructura central tiene la forma de un baúl que contiene los cojines y las estructuras de cada taburete.

El mueble presenta un diseño ergonómico de seguras esquinas redondas, e incluye seis cojines de tres colores (gris claro, gris oscuro y verde) que sirven tanto en el sofá como en el piso al transformarse el sofá en mesa. Los cojines están rellenos con espuma compacta que ofrece un soporte firme y cómodo sin importar la configuración del mueble.

Sin duda, este sofá convertible es una magnífica idea para espacio pequeños o para una habitación de niños.

Con información de: homeworlddesign.com

Para abrirlo hay que “pelarlo” como una fruta

La empresa diseñadora de muebles e iluminación, con sede en Portland-Estados Unidos, Leah KS Amick, creo recientemente un gabinete bajo; en el que el usuario, en lugar de abrir las puertas con una perilla típica, debe tirar de un par de pestañas para que las puertas se despeguen progresivamente del marco, revelando un colorido respaldo de tela y cuatro estantes ajustables.

Su nombre Peel -(pelar) como se abren las frutas- nace precisamente de esa particular manera de abrir el mueble y al respecto, la compañía creadora, asegura que: “La inspiración de Peel llegó de buscar una alternativa a las puertas de los muebles y a la interacción que tiene el usuario con las superficies, su manipulación y las expectativas puestas en un objeto”.

Actualmente, este mueble se ofrece con combinaciones de recubrimientos diferentes y con cuatro opciones de madera (contrachapada de arce, contrachapada de nogal, arce macizo y nuez maciza) junto con cuatro colores para el interior de las puertas, incluido el verde azulado, vino, plata y bronce.

Con información de: www.housebeautiful.com

Estudiantes chilenos crean La Silla 7, con tecnología digital

Los estudiantes chilenos Bruno Marsino y Esteban Gutiérrez, de tercer año de Diseño de la Universidad Adolfo Ibáñez de Chile, obtuvieron el segundo lugar en el Concurso de Diseño de Madera21, en la Semana de la Madera 2019, por el diseño y fabricación de la Silla 7, una novedosa pieza construida con tecnología digital.

La idea de la Silla 7 surgió del curso “Fabricación Digital”, impartido en el segundo año de la carrera de Diseño de la Universidad Adolfo Ibáñez. El encargo era crear una escultura de madera a través de herramientas digitales y maquinaria avanzada, pero los alumnos Marsino y Gutiérrez quisieron ir más allá y crear un objeto utilitario.

Como cuenta Marsino, crearon un objeto de diseño a partir de la reutilización de retazos de madera de raulí, nogal y cerezo obtenidos de barracas industriales. Además, aprovecharon la tecnología de las máquinas para dar a la silla una forma moderna y futurista que difícilmente podrían haber logrado de manera artesanal. “La tecnología se presenta en el diseño y modelaje digital -con programas CAD en conjunto con el corte de las piezas por maquinaria Router CNC- y el trabajo artesanal se ve en el dimensionado de los retazos y el ensamblaje final de las piezas”, explica.

Como explican sus creadores, el mueble alude a una estética retrofuturista que nació en Estados Unidos en los años sesenta, época en que la sociedad veía con optimismo los avances tecnológicos, y cuya arquitectura se caracteriza por ángulos agudos y formas alusivas a alas y alerones de aviones y naves espaciales. “Sabíamos cómo queríamos fabricar la silla aprovechando estos procesos industriales para darle forma, y fue la estética retrofuturista la que mejor representaba a este tipo de fabricación”, explica Marsino.

Concurso de Diseño de Madera21

Luego de los buenos resultados en su curso, Marsino y Gutiérrez -junto a su profesor guía- decidieron participar en el Concurso de Diseño de Madera21, en el marco de la Semana de la Madera 2019, pues la creación se ajustaba a los requisitos: productos de uso diario que integrara la madera como material principal, desde un enfoque tecnológico, bioeconómico y sustentable.

Obtuvieron el segundo lugar del certamen y esto les permitió abrir sus opciones para seguir trabajando en su creación. “Pensábamos que ésta iba a ser la última etapa del proyecto Silla 7, pero nos dimos cuenta de todas las oportunidades que aparecieron, entre ellas la de seguir desarrollando el concepto a partir de retazos. Además, estamos pensando en fabricar la Silla 7 en una colección de pocas unidades en conjunto con el Fablab UAI y el FablabABG del colegio Blest Gana”, concluye Marsino.

Con información de:www.madera21.cl

El espectacular auto deportivo hecho de madera

Los vehículos eléctricos han cambiado por completo las tendencias de la industria automotriz tratando de que los automóviles tengan un impacto menor sobre el medio ambiente; y en este sentido, el Ministerio de Medio Ambiente de Japón ha creado un superdeportivo sin precedentes, hecho completamente de madera.

Todo este automóvil -compuesto de fibras de nano celulosa, o de materiales derivados de plantas (incluidos desechos agrícolas)- pesa solo una quinta parte que el acero y es cinco veces más fuerte que este material, señaló el Ministerio del Medio Ambiente japonés.

Gracias al uso de esas fibras que componen la mayor parte de la carrocería y del interior, logró como resultado un automóvil que tiene casi la mitad del peso que uno tradicional, con una reducción de masa general del 10%.

El vehículo de nano celulosa (NCV) tiene un aspecto espectacular. Los ángulos afilados de la carrocería y las puertas de ala de mariposa recuerdan a los de un Lamborghini. En su interior se destacan los asientos recubiertos de tela de kimono y un magnífico panel de madera, sin ese aire de madera falsa que exhiben la mayoría de coches de ese tipo.

Toda la investigación y el diseño se centraron en la carrocería del coche, no en la parte mecánica. No se sabe realmente qué tipo de fuente energética utilizará, pero se rumora que estará equipado con una celda de combustible de hidrógeno y que tendrá una velocidad máxima de 119 km/h.

Según el portal tecnológico Jalopnik, esta nueva tecnología está siendo desarrollada y calibrada desde hace ya una década. La combinación de varias sustancias es lo que les ha permitido diseñar una carrocería más ligera que las conformadas por metales tradicionales.

Con información de: urbantecno.com

La torre de madera que se retuerce a medida que se seca

La Torre Urbach, construida por el alemán Markus Rüggeberg, es una estructura de madera única en el mundo, pues fue concebida para que se retuerza de manera controlada, a medida que se seca el material.

La singular Torre está ubicada en la localidad de Urbach-Alemania-, y es un proyecto pionero creado para la celebración tradicional germana de verano del Remstal Gartenschau 2019, un evento que de mayo a junio se lleva a cabo en 16 municipios y se centra en proyectos de arquitectura sostenibles.

A diferencia de la fabricación tradicional, en la que la humedad es un factor que causa problemas y grietas; en este proyecto la humedad se controla y se puede programar para que se produzca una deformación natural de automoldeado en la madera.

En efecto, las nuevas simulaciones computacionales llevan a una predicción más precisa y ahora le permiten a los ingenieros y arquitectos utilizar esta hinchazón y reducción de la madera, inducida por la humedad para diseñar y programar movimientos de automoldeación específicos a una escala cada vez mayor.

La Torre Urbach consta de 12 componentes curvos hechos de madera contralaminada; su estructura portante exhibe un grosor de 90 mm y una altura de más de 14 metros, lo que da como resultado una relación de grosor de aproximadamente 160/1.

La curvatura inherente permite una estructura de torre supremamente delgada y liviana de solo 38 kg por metro cuadrado de superficie. Actualmente, esta torre se constituye como la primera estructura con madera para soportar cargas a nivel mundial hecha de componentes automoldeables a escala de construcción.

La estructura de madera contralaminada (CLT) curvados para la torre se diseñaron como paneles planos bicapa de madera de abeto, que se fabrican con un alto contenido de humedad y laminados específicos y se secan en un proceso técnico estándar de la industria.

Cuando se retira de la cámara de secado, las piezas están curvadas con precisión. Las partes se superponen y se laminan juntas para bloquear la geometría en su lugar, formando componentes CLT curvados más grandes con una geometría estable de forma.

Se han desarrollado modelos de mecánica computacional específicos del material para diseñar, predecir y optimizar la disposición del material necesaria para producir diferentes tipos de curvatura y radio.

La tecnología de la fabricación automoldeada para tableros de madera maciza y la rápida adaptabilidad del proceso a diferentes curvaturas abren posibilidades arquitectónicas nuevas para estructuras de madera de concha delgada, utilizando un material de construcción sostenible, renovable y de origen local.

La Torre Urbach es una de las 16 estaciones diseñadas por algunos de los arquitectos alemanes más reconocidos para el Remstal Gartenschau 2019. Las estaciones son edificios pequeños y permanentes que evocan las tradicionales capillas blancas distribuidas en los campos y viñedos a lo largo del pintoresco valle de Rems.

Con información de: www.itke.uni-stuttgart.de

El mueble más grande de Latinoamérica se levanta en Bogotá

Sobre la carrera 29, en una cuadra del barrio Santa Sofía, al norte de Bogotá, hay una construcción de madera enorme. Es una cajonera de seis pisos que tiene tres metros de ancho, un par de patas talladas y ocho cajones, cada uno con su manija de hierro; se trata de un edificio que atrae tanto a clientes que quieren comprar muebles como a turistas que sólo desean tomarse fotos.

“Su construcción se ejecutó entre abril y octubre del año pasado e intervinieron unas 40 personas”, dice Sandra Holguín, una de las propietarias de Casa Quinta, el negocio de muebles que tiene fachada de cajonera. Entre los que ayudaron a levantarla hubo carpinteros, arquitectos, maestros de obra y pintores de madera.

El edificio, en sí mismo, constituye una estrategia de marketing descomunal porque es un mueble de más de diez metros de alto, hecho con tiras de madera de granadillo -material resistente a las inclemencias del clima y una de las maderas más densas del mundo- de 12 centímetros que se pusieron una sobre la otra hasta componer un muro compacto.

Todo el mueble está hecho con esa madera, excepto las patas, que son de cedro, un material menos duro, más maleable, y cuya función no es estructural sino decorativa.

Sandra dice que desde siempre -desde sus 18 años- tuvo gusto por este tipo de diseños. “En esa época exportaba a Costa Rica. Fue en este negocio que conocí a mi esposo. Él era quien me fabricaba los muebles”, recuerda Sandra. A ambos los unía que en sus familias abundaban los ebanistas.

Para su edificio pensaron si hacían un mueble cuadrado, si le ponían cajones en vez de puertas y las posibles formas de las patas; contrataron una diseñadora que tardó cinco meses en una propuesta, pero el resultado no les gustó. Tuvieron entonces que hacer el diseño por su cuenta. “Al comienzo pensábamos en una silla, pero nos dimos cuenta de que no quedaba bien para un edificio. Entonces mi esposo empezó a dibujar y finalmente llegó a una cajonera”, explica Sandra.

Siempre les gustó llamar la atención de la gente. A las ferias de muebles y de accesorios para el hogar llevaban sillas enormes que atraían el interés del público, pero otras empresas empezaron a copiar sus diseños. Después de un tiempo, comenzaron a ver sus propios muebles en otros almacenes.

La empresaria se queja de que el esfuerzo que hace alguien que se dedica a innovar no se compara con el que hacen los que se dedican a imitar. “Queríamos que la gente notara que la forma de diseñar era nuestra, que fuera algo que no se pudiera copiar”, explica Sandra. Fue entonces cuando decidieron hacer el que ellos llaman, tal vez, el mueble de madera más grande de Latinoamérica.

Con información de: www.eltiempo.com